Como hemos observado en los párrafos previos la recesión del 29 tiene grandes semejanzas con la recesión actual. Como ha sido documentado en todos los medios de comunicación, a finales de 2008 reventó la bolsa de valores de Nueva York como consecuencia de una grave crisis crediticia e inmobiliaria y un dólar anormalmente bajo en los mercados internacionales. Trayendo como consecuencia la bancarrota de algunas de las entidades financieras mas poderosas del mundo como es el caso de Lehman Brothers y Merryl Linch quienes tenían entre sus activos muchos de estos títulos crediticios.
Vemos entonces como en los últimos meses hemos experimentado una oleada de despidos masivos y disminución en el consumo que traen como consecuencia la quiebra generalizada en muchos otros sectores de la economía mundial.
De lo anterior podemos deducir que el ciclo económico se repite al igual que en 1929 con un gran auge en los años precedentes hasta un punto máximo después del cual entramos en situaciones de crisis como la actual, y a pesar de tener como referencia no solo la crisis del 29 sino las diversas recesiones que se presentaron a lo largo del siglo pasado, no hemos podido prevenir ni encontrar un adecuado accionar para la corrección de estos fenómenos.
Vemos entonces como en los últimos meses hemos experimentado una oleada de despidos masivos y disminución en el consumo que traen como consecuencia la quiebra generalizada en muchos otros sectores de la economía mundial.
De lo anterior podemos deducir que el ciclo económico se repite al igual que en 1929 con un gran auge en los años precedentes hasta un punto máximo después del cual entramos en situaciones de crisis como la actual, y a pesar de tener como referencia no solo la crisis del 29 sino las diversas recesiones que se presentaron a lo largo del siglo pasado, no hemos podido prevenir ni encontrar un adecuado accionar para la corrección de estos fenómenos.
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